Maritza mi prima tenía 41 años cuando detectaron su cáncer de seno, exactamente la misma edad que tenía su mamá (mi tía) cuando tuvo que lucharlo lastimosamente con un final que no fue feliz.
No era fácil para ella enfrentar su realidad con este antecedente, pues creció toda la vida con el recuerdo que este fantasma le había arrebatado lo que mas quería cuando tenía tan solo 7 años.
Siempre la vimos fuerte y llena de esperanza, y a pesar de no tener ninguno de sus padres vivos, su hermano y sobrina en otra ciudad y su hermana en un convento de clausura, la fe estuvo con ella, su familia y amigos fueron su motivación.
Hoy , a sus 51 años, Martiza es mas feliz que nunca, a raíz de la enfermedad tomó decisiones importantes como renunciar a su trabajo donde llevaba 21 años para poder disfrutar las pequeñas cosas de la vida.
Su valentía y alegría son ejemplo e inspiración para todas las que enfrentamos esta situación.
Este es su testimonio:
Soy María Isabel Llano Hinestroza, tengo 51 años y pertenezco a una familia donde el cáncer de seno ha estado muy presente.
Mi primer contacto con esta realidad fue a los 7 años cuando después de un año de lucha y de tristeza por dejar 3 niños pequeños ,muere mi mamá a los 41 años de edad.
A partir de este momento y a medida que fuimos creciendo mi hermana y yo fuimos conscientes del riesgo que teníamos de heredar esta enfermedad lo cual nos hizo empezar a muy temprana edad a ser muy constantes con la mamografiá cada año.
Hace diez años después de hacerme mi revisión anual, recibí una llamada de la ginecóloga donde me solicitó ir urgente a su consultorio ya que el resultado de este examen no estaba bien.
En ese momento me asusté y salí inmediatamente para hablar con ella, me explicó que en mi seno derecho aparecían varias microcalcificaciones las cuales requerían una biopsia urgente.
A partir de este momento empieza la angustia y el proceso de lucha por la vida.
De ahí en adelante lo primero que me realizan es una mastectomía bilateral que fue muy dolorosa, ya que en el mismo momento fueron implantadas las prótesis, posteriormente otra operación y por ultimo 4 quimioterapias de las rojas que son las mas fuertes.
Después de 10 años de haber superado este momento tan difícil , puedo decir que el cancer para mi fue un aprendizaje de vida.
Nunca sentí que la enfermedad me llevaría a la muerte como lo hizo con mi mamá, sinembargo, especialmente en las noches me asaltaba el miedo de enfrentar todo lo que se me esperaba por vivir.
La enfermedad me enseño :
1. A valorar la vida en sus mas mínimos detalles.
2. A confiar en la sabiduría del cuerpo que siempre apuesta primero por la vida.
3. A confiar mas en mi misma y a tener una mayor claridad en lo que que quiero.
3. A reconocer el gran valor del amor, apoyo y acompañamiento de la familia.
4. A afianzar mi fe en Dios como fuente primera de Amor y Misericordia y como el compañero inseparable de nuestra vida en todos los momentos, buenos, regulares y malos.
mllanohinestroza@hotmail.com
Marisa querida, primita. Te admiro por la fortaleza que has tenido durante toda tu vida. Gracias por compartir lo que aprendiste. Que Dios te siga cuidando y guiando en esta nueva etapa que has decidido comenzar. Un nuevo capitulo con nuevas vivencias que atesorar. Recibe un abrazo fuerte!
Marisa Primita hermosa, te quiero mucho. Mi mas profunda admiración y gratitud por lo que me enseñas con tu testimonio y con tu vida. Dios te siga acompañando y bendiciendo!